Recuerda que cuando era niño pegaba el oído en la radio para escuchar los temas de Fernandito Villalona y Wilfrido Vargas, entre otros artistas para aprenderse sus canciones. “Mi mamá me regañaba, pero yo estaba pa’ lo mío que era la música. En la escuela siempre me desenvolvía en las actividades artísticas. Yo quería estar en todo. Hasta si me querían de árbol en un acto cultural yo decía que sí”, comenta Antonio De La Rosa, conocido por todos como Omega, quien con su grupo Mambo violento ha puesto a bailar a millones de caribeños en los últimos dos años.
A pesar de que el cantante siempre sintió admiración por la música, no fue sino hasta hace seis años que se lanzó profesionalmente y desde entonces su carrera ha ido en ascenso.
¿Qué es lo que tiene de especial tu música que a la gente le gusta tanto?
Pues que es especial – dice entre risas el merenguero– Yo creo que el hecho de que es original. Lo que nosotros hacemos es recoger lo tradicional y mezclarlo con reggaetón, hip hop y así sale éste merengue urbano o mambo callejero.
Algunas personas dicen que ciertas canciones tuyas son un poquito subidas de tono
La gente habla mucho. Las letras nuestras son inéditas. Empecé a escribir cuando tenía como 11 años. Trato de que las letras hablen de la vida, de lo real. Trato de no mentir. Todavía no he conocido a nadie más sincero que yo para todo, para lo bueno y para lo malo. La música que no es real no es música. En mis canciones yo suelto cualquier verdad. Por ahí hay mucho mentiroso. Hay tipos que viven diciendo que tienen mujeres, jipetas y cuenta en dólares, entonces cuando yo les tiro en una canción se molestan. Y mira que no hablo de nadie en especial, me refiero a ese tipo de gente y se lo toman personal.
¿Te molesta que te critiquen?
No, ése es el pan nuestro en esta carrera. Me molesta que haya personas que para quedar bien o para tener algo de qué hablar, digan blasfemias sobre los demás.
A pesar de que el cantante siempre sintió admiración por la música, no fue sino hasta hace seis años que se lanzó profesionalmente y desde entonces su carrera ha ido en ascenso.
¿Qué es lo que tiene de especial tu música que a la gente le gusta tanto?
Pues que es especial – dice entre risas el merenguero– Yo creo que el hecho de que es original. Lo que nosotros hacemos es recoger lo tradicional y mezclarlo con reggaetón, hip hop y así sale éste merengue urbano o mambo callejero.
Algunas personas dicen que ciertas canciones tuyas son un poquito subidas de tono
La gente habla mucho. Las letras nuestras son inéditas. Empecé a escribir cuando tenía como 11 años. Trato de que las letras hablen de la vida, de lo real. Trato de no mentir. Todavía no he conocido a nadie más sincero que yo para todo, para lo bueno y para lo malo. La música que no es real no es música. En mis canciones yo suelto cualquier verdad. Por ahí hay mucho mentiroso. Hay tipos que viven diciendo que tienen mujeres, jipetas y cuenta en dólares, entonces cuando yo les tiro en una canción se molestan. Y mira que no hablo de nadie en especial, me refiero a ese tipo de gente y se lo toman personal.
¿Te molesta que te critiquen?
No, ése es el pan nuestro en esta carrera. Me molesta que haya personas que para quedar bien o para tener algo de qué hablar, digan blasfemias sobre los demás.
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