Mientras Frank Reyes se niega a reconocerle derechos a su ex manager, este último enfrentó contigente policial por su causa

Fíjense como son las cosas. Mientras Frank Reyes se niega a pagarle sus prestaciones laborales a su ex manager Sergio Santiago, alegando que no era su empleado, este último ha debido enfrentar una demanda que tiene el bachatero por haber incumplido hace tres años con una presentación en la discoteca Monte Bar, de Santiago.
De acuerdo a lo que narra el periódico El Nacional, por su condición de representante de Reyes, Santiago vio rodeada su casa este jueves en la mañana por agentes policiales y fiscales, a solicitud de la parte querellante que había emplazado al artista para que le indemnizara por daños y perjuicios que provocó su ausencia en ese baile.
A Sergio Santiago no le quedó más remedio que firmar, según él, bajo presión y amenazas de un fiscal y un "contingente" policial, un documento en que se responsabilizaba por el pago de 593 mil pesos como reparación. Al hombre hasta le iban a embargar todo lo de su casa.
Es decir, Sergio Santiago, quien debió remitir a dónde Frank Reyes a los que irrumpieron en su casa, en una actitud un tanto generosa y responsable prefirió coger esa "pela" por el bachatero, el mismo que se niega a reconocerle sus derechos y anda pregonando que el promotor artístico nunca ha sido su manager.
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